El Perro (de Carlos Sorín)
Más de uno insinúa desconfianza cuando se trata de una película protagonizada con no actores. Bien, en el caso de El perro De Carlos Sorín esto no es ningún problema. Juan Villegas, que hace de Juan Villegas, es un excelente actor cuando hace de Juan Villegas. Si lo ponemos a actuar de asesino serial u homosexual seguro que falla. Lo mismo ocurriría con Walter Donado y el resto del elenco. Recordemos al Rulo de Mundo Grúa, cuando lo contrataron para trabajar en televisión junto a Celeste Cid y (ay) Emmanuel Ortega fracasó(más allá de lo pedorra que fue esa tira). Porque no es actor y la mayoría de los no actores solo funcionan cuando hacen de si mismos. Pero ojo, esto solo funciona cuando los directores los saben manejar. Solo Trapero y otros pocos logran hacerlo bien, uno de ellos es por supuesto Sorín. El perro es una película súper sencilla, modesta, infinitamente emotiva, está cargada de humor, un humor extraño, sensacional. Sorín lo logra solo con las caras. Las caras inocentes, verdaderas, espontáneas e imprevisibles de Juan Villegas y su perro Bombón. Solo un momento puede tornarse un poco aburrido, cuando el director indaga en el mundillo de las exposiciones de perros, ahí aburre un poco, el resto de la historia es impecable. A pesar de lo trivial de la película, Sorín se da el lujo de contar una historia cargada de poesía, melancolía y humor. Todo enmarcado en un ameno cuadro excesivamente realista. Más allá del hype el film de Sorín funciona de puta madre.
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