Ya se percibía en el disco anterior Nuevo Día, Nonpalidece es una banda que ha madurado.
En su nuevo disco, que no varía mucho en lo musical con su antecesor, la banda se define como una de las más importantes en lo que a reggae se refiere. Hagan correr la voz suena contundente, muy limpio, se notan los arreglos acordes con un sonido realmente roots. Acá no hay reggae stone, ni intenciones de mestizaje alguno. Esto es reggae y suena a reggae. Si bien la banda ha crecido, mantiene su estilo roots a raja tabla. Salvo unos scratches en “Reggae en el Universo” –primer track y al mismo tiempo primer corte del disco- no hay elementos extraños que puedan perturbar el oído del oyente que ama los sonidos tradicionales de esta hermosa música jamaiquina. El disco no defrauda ni sorprende, solo enfatiza más el poderío con el que Nonpalidece se planta en el escenario y remarca el buen pulso de una banda que pasa por su mejor momento.
Gustavo Pilati –ex Cafre- que antes era músico invitado en los teclados y algunas guitarras y ahora parece incorporarse definitivamente como un miembro estable en la banda, aporta lo suyo con líricas más que positivas en canciones donde sobresalen los temas ecológicos y de escape que recuerdan a los viejos tiempos con la banda de Bonetto y compañía.
La placa contiene momentos muy disfrutables como “Tu presencia”, “Danger Man”, “La Sonrisa” y “En el río”, tema en el que la banda marca su procedencia (El Tigre).
Nonpalidece es una de las mejores bandas de reggae del país, no creo que haya alguna discusión al respecto. Su nuevo trabajo lo garantiza, hagan correr la voz.
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