Riddim ha llegado al nivel de maduración ideal. Este nuevo disco posee todos los sonidos necesarios para que una obra de reggae realizada en Argentina pueda llevarse a los parámetros internacionales. Y al decir reggae, que quede claro, no se trata de ninguna de esas mentiras con las cuales nos cansan una y otra vez tantas bandas locales.
Aquí decimos reggae y es reggae. No cumbia, candombe, folklore, punk, etc. No, esto es reggae puro.
La formula es muy simple: la voz del cantante en primer plano, teclados y guitarras a la misma altura mediante los riffs, solos austeros y agradables, vientos muy bien puestos en todos los temas, y letras esperanzadoras que no caen en los clichés demagogos que suelen caracterizar a los malos letristas que toman al estilo jamaiquino como propio.
Del cantante también se puede decir que su originalidad sigue gozando de buena salud gracias a que: canta bien, no tiene defectos de pronunciación, y fundamentalmente, no abusa del reggamufin.
En preparen…apunten…fuego, Riddim deja de lado el ska visitado en los discos anteriores para dedicarse más en profundidad a los susurros del regaae roots; junto a Los Cafres (en su primer etapa), Mensajeros, Dread Mar I y Nonpalidece es una de las bandas que mejor lo hace en Argentina. Y este disco sobresale por encima de los otros que editaron hasta ahora. Larga vida para Riddim.
Aquí decimos reggae y es reggae. No cumbia, candombe, folklore, punk, etc. No, esto es reggae puro.
La formula es muy simple: la voz del cantante en primer plano, teclados y guitarras a la misma altura mediante los riffs, solos austeros y agradables, vientos muy bien puestos en todos los temas, y letras esperanzadoras que no caen en los clichés demagogos que suelen caracterizar a los malos letristas que toman al estilo jamaiquino como propio.
Del cantante también se puede decir que su originalidad sigue gozando de buena salud gracias a que: canta bien, no tiene defectos de pronunciación, y fundamentalmente, no abusa del reggamufin.
En preparen…apunten…fuego, Riddim deja de lado el ska visitado en los discos anteriores para dedicarse más en profundidad a los susurros del regaae roots; junto a Los Cafres (en su primer etapa), Mensajeros, Dread Mar I y Nonpalidece es una de las bandas que mejor lo hace en Argentina. Y este disco sobresale por encima de los otros que editaron hasta ahora. Larga vida para Riddim.
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