miércoles, octubre 06, 2010

Las intermitencias del Xeneize

Columna breve boquense, dinámica e impensada

Merecer o no merecer, esa es la cuestión. Contra Estudiantes el equipo de Borghi mereció perder, contra Lanús no. No obstante los técnicos se enojen cuando los traten de defensivos (chequeen la polémica Cappa/Falcioni) el fútbol argentino (hoy en día uno de los peores del mundo) es, por escándalo, hiper defensivo. Los equipos que andan bien lo logran por su consolidada defensa, trabajan día y noche para ser defensivos. Y así, ya sean chicos o grandes, logran ganar campeonatos (cortos, que espero de una vez por todas se terminen). El fútbol ofensivo –bien jugado- en nuestro país es cosa del pasado, solo llegaba a eso el Huracán de Cappa (River está a 20.000 millas) y es posible que Godoy Cruz en unos años también sea señalado por marcar la diferencia (primero con Cocca, ahora con Asad). Haber perdido sin merecerlo con el ultra defensivo Lanús por un penal dudoso en tiempo de descuento es anecdótico en comparación a lo que se puede venir: técnicos respetables (de los mejores como Cappa o Borghi) quedando en ridículo por ser parte del patético fútbol argentino. Que se come hasta los choripanes.

No hay comentarios.: