La mediocridad que impera en el periodismo deportivo ha llegado a establecer, en los últimos años, un lugar de conflicto absolutamente ajeno a cualquier expresión deportiva, más bien allegada a la banalidad de programas como el de Jorge Rial, por ejemplo.
Meter cizaña, generar caos, difamar, sobre valorar, humillar, parece ser la fácil tarea a la cual están a bocados estos buitres de saco y corbata. Defender lo indefendible con tal de preservar ese fanatismo ridículo que impone el fútbol es una de sus estrategias más fatales.
¿Los argentinos somos racistas? Es una pregunta estupida para una respuesta obvia. El racismo en el fútbol europeo es muy común, parece ser el justificativo irresponsable. Es lógico, tres años en la escuelita de Fernando Niembro… que le podemos pedir?
Nacho Goanao empezó llevándole facturas a Pergolini, de ahí a esta parte no hizo absolutamente nada más. La prueba está al alcance de todos, solo basta encender la radio o el televisor de vez en cuando. Lo que Goano entiende por fútbol está en las antípodas de lo que realmente es. Pero mientras a Pergolini le siga divirtiendo, allí estará. Fíjense como está el periodismo deportivo que Bilardo tiene dos o tres programas, el colorado Liberman opina ante una cámara y Macaya con lo ga ga y todo sigue siendo el más creíble.
Todos los periodistas, incluso los periodistas deportivos, alguna vez habrán estudiado que todas las palabras tienen acepciones, que a todas las frases se las puede sacar de contexto. NEGRO DE MIERDA, NO.
¿Los argentinos somos racistas? Si crees que si explayate en los comentarios, si pensas que no pasá a la página 48.
Meter cizaña, generar caos, difamar, sobre valorar, humillar, parece ser la fácil tarea a la cual están a bocados estos buitres de saco y corbata. Defender lo indefendible con tal de preservar ese fanatismo ridículo que impone el fútbol es una de sus estrategias más fatales.
¿Los argentinos somos racistas? Es una pregunta estupida para una respuesta obvia. El racismo en el fútbol europeo es muy común, parece ser el justificativo irresponsable. Es lógico, tres años en la escuelita de Fernando Niembro… que le podemos pedir?
Nacho Goanao empezó llevándole facturas a Pergolini, de ahí a esta parte no hizo absolutamente nada más. La prueba está al alcance de todos, solo basta encender la radio o el televisor de vez en cuando. Lo que Goano entiende por fútbol está en las antípodas de lo que realmente es. Pero mientras a Pergolini le siga divirtiendo, allí estará. Fíjense como está el periodismo deportivo que Bilardo tiene dos o tres programas, el colorado Liberman opina ante una cámara y Macaya con lo ga ga y todo sigue siendo el más creíble.
Todos los periodistas, incluso los periodistas deportivos, alguna vez habrán estudiado que todas las palabras tienen acepciones, que a todas las frases se las puede sacar de contexto. NEGRO DE MIERDA, NO.
¿Los argentinos somos racistas? Si crees que si explayate en los comentarios, si pensas que no pasá a la página 48.
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