Topada (no deseada) de fin de año

Hoy como todas las mañanas voy a buscar los diarios, entre ellos aparece esta tapa en Pagina 12, no hago nada más que darme vuelta y detrás mio veo la arcaica figura de un milico. Si, frente a frente tengo a un milico hijo de re mil puta, uno que cruzamos todos los días, uno de esos que tuvo que ver directamente en la sangrienta dictadura del 76, uno de esos que nos gobernó, por lo menos a los habitantes de esta aldea. El viejo me mira con la cara de pelotudo que lo caracteriza, pienso en Julio López, en este tipo del diario, en los 30.000 desaparecidos y me pregunto como esta bazofia puede entrar y salir tranquilamente del kiosco. Todas las putas mañanas. Encima lo saludan como si nada, compra el mismo puto diario de todos los días y se va. Así nomás, como quien no quiere la cosa.
Feliz año nuevo.